Si, y lo mejor de todo fue que tuve tiempo para hacer todo lo que tenía que hacer.
El Viernes nos reunimos todos los bloggers en Parkeo Bar para compartir y hacer algo bueno para la comunidad (para que vean que no sólo escribimos disparates sino que también hacemos cosas buenas).
Llegué a la reunión en un patín. Ya antes Annush y yo habíamos ido al Multicentro Churchill (cuidado que ahí están robando carros) a comprar los “asuntos” (como todo el mundo borró el post, confiamos en nuestras memorias masculinas para tratar de recordar qué era que teníamos que comprar). Llegamos cargadas de fundas y luego de depositarlas nos integramos al grupo.
La verdad es que yo no estaba en las mejores condiciones. La espalda me estaba hablando alto (esa azarosa se cree que me puede gobernar la vida), así que después de buscar una frescosa me senté en unas escaleritas a ver la noche pasar. Entre el cansancio y otras cosas, no estaba muy sociable que digamos (sorry), pero traté de no pasar por pesada. Ví muchas caras conocidas y muchas más nuevas (esto de los blogs está creciendo rápidamente). Me llamó sobre todo la atención las personas que tenían los t-shirts negros de cyberconcho. Me apena decirlo, pero nunca había oído hablar de ese site, y eso que una amiga de la Princesa de Dallasnargas pertenece al blog.
De nuevo me pareció muy simpático cuando personas venían donde mí con su muy nice “¡hola Bracuta! Lo más gracioso de todo eso es que efectivamente me conocen. ¡Que cosa más grande esto de los blogs! ¡Ji ji ji!
Uno de ellos se me acercó y me saludó. Me dijo que venía de NY y que conocía a Remo y a Edwin. Comenzamos a hablar y entre una cosa y otra descubrimos que acababa de comprarle un apartamento a mi hermano en una de las torres que está construyendo. ¡Qué chiquito es el mundo!
Después de estar un rato mingling, mis úlceras estaban ya casi insultándome, así que me fui a comer para Pranzo (estoy enviciada con sus pita chips) con Annush y con Libélula. Nos quedamos un rato unwinding y haciendo unos planes macabros para un viajecito que estamos armando, y después (como a eso de la 1:30 am) fui a buscar a mi niña que la había dejando parqueada en Parkeo, ya que tenía que levantarme temprano al otro día.
Nunca pensé que todavía había bloggers en Parkeo, pero por los comentarios veo que el bonche fue para largo. Sorry guys, pero mi cuerpo no aguantaba más.
Por cierto, Alfonso, ¡no seas chismoso! No salí como una jevita de la Lincoln, lo que pasa es que quería llegar a mi casa y aparte de eso mi niña tiene par de “hierros” y por eso suena (tengo que aceptar también que salí medio rápido, pero se me excusa).
Quiero felicitar públicamente a Alfonso por la iniciativa y por el trabajo realizado. ¡Si sigues así de segurito que te ganas un lugar en el cielo!
Si quieren ver unas cuantas fotos de la reunión, hagan click aquí.
El Viernes nos reunimos todos los bloggers en Parkeo Bar para compartir y hacer algo bueno para la comunidad (para que vean que no sólo escribimos disparates sino que también hacemos cosas buenas).
Llegué a la reunión en un patín. Ya antes Annush y yo habíamos ido al Multicentro Churchill (cuidado que ahí están robando carros) a comprar los “asuntos” (como todo el mundo borró el post, confiamos en nuestras memorias masculinas para tratar de recordar qué era que teníamos que comprar). Llegamos cargadas de fundas y luego de depositarlas nos integramos al grupo.
La verdad es que yo no estaba en las mejores condiciones. La espalda me estaba hablando alto (esa azarosa se cree que me puede gobernar la vida), así que después de buscar una frescosa me senté en unas escaleritas a ver la noche pasar. Entre el cansancio y otras cosas, no estaba muy sociable que digamos (sorry), pero traté de no pasar por pesada. Ví muchas caras conocidas y muchas más nuevas (esto de los blogs está creciendo rápidamente). Me llamó sobre todo la atención las personas que tenían los t-shirts negros de cyberconcho. Me apena decirlo, pero nunca había oído hablar de ese site, y eso que una amiga de la Princesa de Dallasnargas pertenece al blog.
De nuevo me pareció muy simpático cuando personas venían donde mí con su muy nice “¡hola Bracuta! Lo más gracioso de todo eso es que efectivamente me conocen. ¡Que cosa más grande esto de los blogs! ¡Ji ji ji!
Uno de ellos se me acercó y me saludó. Me dijo que venía de NY y que conocía a Remo y a Edwin. Comenzamos a hablar y entre una cosa y otra descubrimos que acababa de comprarle un apartamento a mi hermano en una de las torres que está construyendo. ¡Qué chiquito es el mundo!
Después de estar un rato mingling, mis úlceras estaban ya casi insultándome, así que me fui a comer para Pranzo (estoy enviciada con sus pita chips) con Annush y con Libélula. Nos quedamos un rato unwinding y haciendo unos planes macabros para un viajecito que estamos armando, y después (como a eso de la 1:30 am) fui a buscar a mi niña que la había dejando parqueada en Parkeo, ya que tenía que levantarme temprano al otro día.
Nunca pensé que todavía había bloggers en Parkeo, pero por los comentarios veo que el bonche fue para largo. Sorry guys, pero mi cuerpo no aguantaba más.
Por cierto, Alfonso, ¡no seas chismoso! No salí como una jevita de la Lincoln, lo que pasa es que quería llegar a mi casa y aparte de eso mi niña tiene par de “hierros” y por eso suena (tengo que aceptar también que salí medio rápido, pero se me excusa).
Quiero felicitar públicamente a Alfonso por la iniciativa y por el trabajo realizado. ¡Si sigues así de segurito que te ganas un lugar en el cielo!
Si quieren ver unas cuantas fotos de la reunión, hagan click aquí.
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