Wednesday, March 15, 2006

La pelota es redonda, pero viene en cajas cuadradas

Cuando el Lunes en la noche me montaba en mi jeepioneta luego de compartir con unas amistades en Marocha, lo primero que hice fue prender el radio para escuchar el juego de pelota. Llegué a casa y no me desmonté del carro hasta los comerciales. Hice el cálculo: en los 2 minutos que duran los comerciales en el cambio de equipos en el campo me da tiempo a subir en el ascensor y llegar a mi cuarto para prender la televisión.
Anoche luego de cenar, fui con una amiga a ver el juego en Steak House. Cuando llegó la hora de irnos, dejé a mi amiga en su casa y salí corriendo para la mía (todo el trayecto escuchando el juego por radio). Cuando llegué a casa estaba terminando el 8vo. inning, así que de nuevo hice los cálculos del tiempo que me iba a tomar subir a mi casa, por lo que decidí quedarme escuchando el juego en el carro. Media hora más tarde (porque no me quería perder nada), y luego de casi darme un infarto esperando el último out), subí a casa para comentar el juego y ver los highlights con mami (quien por cierto vió la repetición que hicieron después que el juego terminó y acabó acostándose a las 3 de la mañana)..
Esta mañana, yo misma me estaba riendo sola camino a la oficina. ¿De dónde de pronto me ha nacido este amor por la pelota? Yo siempre veía los juegos desde pequeña, pero de unos cuantos años para acá estoy que no me pierdo uno. Y ahora con esto del Clásico, he dejado de salir de bonche para quedarme en casa viendo los juegos. Si tengo que salir, me llevo mi televisión portátil de 2 pulgadas para poder verlo; cuando los juegos son en la tarde me la llevo para la oficina para poder oir y ver un chin, sin entorpecer mi trabajo.
Si creo que estoy enviciada con los juegos, ni me imagino mi mamá. En casa pasa algo muy cómico: mi mamá y yo somos las fanáticas del baseball. Mi pobre papá simplemente se resigna a ver los juegos con nosotras. El Domingo parece que se cansó de tanta pelota y se fue a ver TV en el estudio, mientras mami y yo veíamos los juegos. Un rato después mami y yo nos fuimos para el estudio y pusimos el juego… ¡ji ji ji! ¡Le caímos atrás!
Anyways, ojalá que gane Cuba hoy porque Puerto Rico está muy duro y nosotros como que nos estamos durmiendo en nuestros laureles.

1 comments:

alfonso said...

la pelota..es la pelota...que juegaso el de puertorico y cuba