Thursday, December 14, 2006

Por el camino que vamos...

Me enteré es esto porque la persona involucrada es un familiar de una amiga y esta mañana me enviaron esta nota de prensa.
Su único error fue equivocarse de vehículo y abrir con su propia llave uno idéntico al suyo...
It seems like something out of an episode of "The Twilight Zone"
EN BUSCA DE JUSTICIA

Después de pasarse toda una mañana, como todos los días, tomando fotografías de índole social para beneficio de su país adoptivo, el fotógrafo norteamericano, y autor del foto ensayo “Cristo Rey: Entre Lucha y Esperanza”, JP Gallagher, vivió una verdadera pesadilla dominicana. Por causa de una confusión causada quizás por la histeria en la que nos encontramos viviendo por el incremento del crimen y la violencia en el país, Gallagher fue acusado injustamente por una señora apellido Rodríguez, de intento de robo de su carro. Tomándose la justicia en sus manos, la sra. Rodríguez instó a una turba de personas que se encontraban en los alrededores de su oficina ubicada en la urbanización La Diana (detrás de Metaldom), a que agarraran a ese hombre que va caminando allí “porque es un ladrón.”

Sin preguntarle nada ni darle la más mínima oportunidad de defenderse, le atacaron dos civiles, que después de amarrarlo de pies y manos, le tiraron contra el pavimento y procedieron a golpearlo violentamente sin explicación alguna y ante los ojos de una multitud de espectadores pasivos, que aprovecharon para robarle a Gallagher, sus objetos de valor. La violencia le causó fracturas en la nariz, hematomas en la cabeza, cuello, brazos y piernas del artista y trabajador social norteamericano, además de las serias heridas no visibles que han de marcar para siempre su vida.

“Estas son las cosas que uno escucha que le pasan a otras personas. Hoy fui yo esa persona,” declaró Gallagher, “Yo soy una persona que creo en la justicia y en la humanidad, pero eso hago este tipo de trabajo sin fines de lucro y para el beneficio de la sociedad. Pero hoy me tocó ver un lado tan oscuro de la humanidad, tan triste. Ver como esta gente me agredía físicamente, y me humillaban, sin ni siquiera preguntarme nada, ni escuchar nada. Es la experiencia más entristecedora de mi vida.”

Gallagher fue esposado y trasladado al destacamento del Plan Piloto en el sector Honduras donde fue recibido a golpes, insultos y punta de pistola, por oficiales de la policía: “Estuve horas allí sin que nadie me pidiera una declaración y sin que me permitieran hacer una llamada a mi esposa, o a mi embajada. Fue terrible estar allí viendo que estaban decidiendo sobre mi vida, sobre mi integridad como persona, pero que no brindaban la más mínima oportunidad de defenderme. Así me trató la policía dominicana. No solamente como un delincuente, sino como un insecto. Porque hasta los delincuentes tienen derechos humanos, derechos ciudadanos, que a mí no me fueron respetados.”


El caso se resolviera seis horas más tarde al pasar a manos del Magistrado Brown, quien parece haber sido la única persona imparcial y objetiva dentro de este destacamento. Brown, después de escuchar las declaraciones de Gallagher y de la sra. Rodríguez, determinó que todo había sido causa de una terrible y lamentable confusión y dio por concluida la denuncia, aunque ya para este momento, la sra. Rodríguez había desaparecido, como desaparecieron también los verdaderos criminales: los golpeadores, los ladrones y los policías corruptos.


¿Qué nos pasa en este país en que la histeria colectiva nos hace tenerle miedo a todo el mundo y responder miedo con violencia? ¿En qué momento se convirtió en aceptable el ajusticiamiento público estilo edad media, sin pruebas, sin jueces, sin justicia? El caso de Gallagher es sólo uno de los muchos que se ven cada día en nuestro país en donde se juzga culpable al ciudadano acusado de un crimen hasta ser probado inocente, ¿no se supones que la constitución dice lo contrario? Y yo me pregunto, ¿qué habría sucedido si en lugar de ser gringo, Gallagher hubiera sido haitiano, o simplemente una persona de escasos recursos? Es aterrorizante pensar que, si desde una posición privilegiada, social y financiera, esto ha podido ocurrirle a Gallagher, que esperanzas de seguridad ciudadana podemos brindarle al resto de la población.

“Yo no quiero que se me de un trato especial por ser norteamericano, o por ser artista, o por lo que sea, pero si quiero utilizar el espacio que estas condiciones me brindan para hacer un llamado a la consciencia pública, a la justicia, a la humanidad y sobre todo a la paz. La justicia nunca debe ser sinónimo de violencia. A pesar de yo no haber sido culpable de ningún crimen, tengo que solidarizarme con las personas que sí han cometido algún delito, ellos también tienen derecho a sus derechos y nadie, debe violentar ese hecho. Hoy yo he sido víctima no de una confusión tonta, sino de un sistema de abuso que comienza con nosotros mismos como ciudadanos y como vecinos y que llega, eventualmente, a afectarnos a todos.”

Ojalá que estas épocas navideñas sirvan para algo más que la celebración y el goce. Que podamos recordar por un momento la importancia de ser humano, la solidaridad, y el respeto a cada persona, sin prejuicios, ni juicios. Ojalá que podamos garantizar la tan predicada generosidad dominicana, para que no terminemos convirtiéndonos en una selva de cemento.

9 comments:

Liga Softcodia said...

Es lamentable que casos como este pasen en nuestro pais, es un verdadero caos lo que tenemos..el que no se ha dado cuenta, que escuche a las personas que como Teo Veras-que es de los que no se expresaban, ni reclamaban nada, si no que mantenian una aptitud pasiva-hoy en dia se han dado cuenta y denuncian que este pais se le fue de las manos a los que lo gobiernan...y no es que sea culpa del gobierno, no, es el sistema que se ha caido, ya que si miras el perfil de los que aspiran a seguir gobernando, que futuro ves???

Anonymous said...

Que mal que haya pasado eso... la justicia de alla... ahhh que joya, trancalo ahi despues averiguas!

Que no pasara con los que tampoco tienen un medio de expresar las cosas que le pasan siendo acusados de algo que no hicieron...

Recuerdo hace mucho oi sobre un preso que tenia 10 anios (y no le habian pasado causa) porque se roboo un salchichon...

Hasta donde llegaremos?

Anonymous said...

Bracuta, escuché el comentario en la 91.3 FM y me dan ganas de mudarte de este pais.

R Cid said...

Bueno... Por eso es que estamos como estamos, sí yo también soy dominicano, pero debemos reconocer que vivimos en la misma jungla que descubrío colón, solamente que ahora hay calles y edificios. Por eso la imagen tan negativa de nuestro país en el extranjero. Pero mientras todos nos quedemos como si no nos importara... va a seguir sucediendo.

Lizzie González said...

wellcome to the Dominican Republic!! y después nos quejamos cuando nos llaman República Bananera y mira como actuamos como monos, haciéndo lo que el otro hace, sin siquiera preguntarnos por qué...y después queremos ir a hablar disparates al blog del guitarrista que se quejó un poco de nustro país y mira en realidad que es lo que somos...

rob said...

es lamentable, lo que sucedio, pero en eso nos han convertido los politicos, en una selva...

Anonymous said...

Eso es lo que pasa cuando la gente anda espantada en la calle creyendo que todo el que le pasa por el lado es un ladrón.

A este pobre señor lo trataron como a una cucaracha, asi que después que no esten hablando pendejadas los periodistas cuando el regrese a su pais, cuente lo que le pasó y nos acaben.

Lo duro es que cuando es un ladrón de verdad la mayoria de la gente no se mete en eso y sigue su camino.

Anonymous said...

Gracias Bracuta y todas las demas personas que han aportado sus comentarios e ideas. Les seguimos pidiendo su apoyo en buscar justicia. Es importante que no dejemos de hablar y sobre todo de pensar. No es posible que dejemos que el pais se lo coman los salvajes y los verdaderos ladrones, esos que andan con saco y corbata.
Lorgia Garcia (la esposa de John Paul).

Anonymous said...

Yo también tuve un problema similar en Santiago hace unas semanas que estuve de vacaciones en el país estando visitando unos viejos amigos en los cerros de gurabo unos guachimanes casi me matan de dos trabucazos por que me confundieron con un malhechor y que hizo la policía nada ni-mierda si no es por que mi primo es un agente de alto rango en la DNCD mi hubiese partido la madre como me expreso uno de los agentes supuestamente relajando.