Eso no se hace...

Ayer al medio día salí un poco temprano de la oficina, pues tenía que ir a hacer una diligencia. Camino para mi casa, y con un hambre "der diañe" iba por la Federico Geraldino casi llegando a la esquina de la Jacinto Mañón, cuando me topé con un tapón. Como se podrán imaginar, comencé a insultar a todo el vivo porque el hambre me estaba matando y quería llegar a mi casa. El asunto es que poco a poco el tránsito fue avanzando hasta que llgué a la esquina y pude ver el por qué del tapón: acababa de ocurrir un accidente. Frente a mí ví un Integra negro con un rasguñito y me puse a buscar el otro carro con el que había chocado. Cuando miré hacia la derecha (yo estaba en el carril izquierdo), ví el carro de mi hermana estacionado y me pregunté qué hacía ella ahí. Cuando ví bien noté que del lado delantero del carro se salía el bumper y el corazón se me paró. Le hice señas al carro que estaba a mi derecha para que me dejara pasar y me estacioné atrás de mi hermana. Salí como una loca corriendo hasta su carro y cuando me acerqué ví que ella estaba con la cabeza baja y los ojos cerrados... Se me paró el corazón y lo único que acerté a decir fue "Fuiste tu?" Cuando ella me oyó se volteó y me dijo que me acababa de poner un beeper (me sonó en ese mismo momento) y después de verificar que estaba bien, fui a ver lo que había pasado al carro...

La pobre, estaba muy nerviosa y casi al punto de llorar. Llamé a mi casa para decirles que no iba a ir a comer porque se me había presentado un problema (no les dije qué era para no alarmarlos) y llamé a mi cuñada, quien por cierto iba casi llegando a la esquina, y esperé que mi cuñado llegara.

El chamaquito del Integra estaba bien; era un estudiante de último año del Colegio Claret. Al parecer, cuando llegó a la esquina no pudo ver a mi hermana parada pues delante de ella acababa de cruzar una jeepeta y le tapó la visión tanto a ella como al chamaquito. El iba despacio y frenó (el carro tiene todos los hierros así que es seguro que casi no le gusta la velocidad y el piso no tenía señas visibles de un frenaso), pero a su carro no le pasó casi nada.

Llamé a la oficina y les dije que no iba a volver en la tarde y procedí a resolver (llamar al seguro, llamar a la grúa, esperar la grúa, llevar el carro al taller, etc..)

Decidimos ir a dar las declaraciones a La Casa del Conductor, que según me habían dicho era más cómodo que ir a coger lucha al Palacio de la Policía.

Hasta ese momento el chamaquito se había portado muy bien, pero luego de dar las declaraciones me montó para que el pagáramos el arreglo porque "el carro estaba muy feo y él no podía salir a la calle así." Qué pendejo! Le explota el carro a mi hermana (el carro no camina) y aparte de eso quiere que le paguemos porque tiene Seguros Pepín.

Si papito, te voy a pagar el carro... nos vemos en los tribunales...

Gracias a Dios a mi hermana no le pasó nada más que un susto y un golpe en la cara. La llevé al médico y luego de 187 radiografías, el médico le dijo que todo estaba bien.

Ah, por cierto, me olvidaba comentarles que me voy a hacer millonaria: los airbags no se dispararon... Qué demanda a la Kia!!!! Ya les contaré cuando la interponga...