Yo no soy el enemigo

Tolerancia
(Del lat. tolerantĭa).
1. f. Acción y efecto de tolerar.
2. f. Respeto a las ideas, creencias o prácticas de los demás cuando son diferentes o contrarias a las propias.

Cada vez que voy a escribir algo en este blog tengo que pensarlo dos veces, y no debería ser así. No debe importarme el qué dirán, no debe importarme que me censuren o me insulten (porque la gente no sabe defender su punto de vista sin ofender al prójimo), ya que al fin y al cabo este blog es mi casa en el Internet y como tal aquí todo cae bajo el “Imperio de Bracuta”.
Lo que sí siempre hago es decir la verdad. Sólo la verdad. Y nada más que la verdad. Gústele a quien le guste y disgústele a quien le disguste. Por lo menos lo que yo considero que es la verdad.
Cuando Dios nos creó, al mismo tiempo hizo la diversidad. Todos pensamos de forma diferente, todos hablamos de forma diferente, todos vivimos de forma diferente, todos tenemos aspectos diferentes. Pero al final somos todos hijos de Dios.
Supongamos que hay una caja verde en el piso. Algunos dirán eso, que en el piso hay una caja verde; otros dirán que hay una caja cuyos colores son una liga del amarillo y el azul. Al final ambas partes están diciendo lo mismo, pero de formas diferentes. Todo depende de la forma en que se mire.
Lo mismo sucede con la religión. Pónganle el nombre que quieran ponerle, pero es mi opinión particular que todos creemos en un solo Dios, llámese cómo se llame.
Yo no estoy parcializada ni le tengo miedo al Comunismo. Tampoco soy extremista, creo que las cosas funcionan mejor cuando están en el medio.
Han desvirtuado para su conveniencia lo que he querido decir.
Yo hice un post de lo que vi y de lo que sentí. No puedo decir lo que los demás piensan porque no estoy en la cabeza de los demás. Además, por enésima vez tengo que decirlo, este es MI blog.
Si lo que querían era que alguien expusiera los acontecimientos desde SU punto de vista, entonces no debieron haber invitado a extraños al grupo.
Entre todos los emails que recibí (que fueron varios, por cierto), hubo uno muy interesante de uno de los organizadores del evento, al cual no he podido responder por falta de tiempo (pero lo tengo en cue). Esta persona (me reservo su nombre porque no tengo su autorización para divulgarlo), quiso explicarnos a Ana y a mí lo que sucedió DE LA MANERA CORRECTA. Por mi parte (no puedo hablar por Ana), logró el objetivo que creo se había propuesto: exponer CALMADAMENTE lo que había sucedido, desde una óptica neutral y sin apasionamientos, no obstante ser uno de los organizadores, y ganarse mi simpatía y mi apoyo. Mis felicitaciones caballero, usted sí supo expresarse objetivamente.
Jóvenes, ustedes predican la tolerancia y la democracia, sin embargo no han sido tolerantes ni democráticos conmigo.
Quizás por su misma juventud, quizás porque todavía sienten que sus libertades le fueron coartadas (como al efecto sucedió), quizás porque no tienen todavía la capacidad de entender que no todo el mundo está obligado a pensar y a actuar como ustedes, me han tildado como el enemigo.
Yo no soy mercadóloga ni publicista. No soy una ignorante que tira fotos y escribe en una página en Internet. Soy abogada con varios años en ejercicio (parece que algunos de ustedes no lo sabían por la forma en que se expresaron). Tuve la suerte de que mi madre estudió Derecho cuando ya yo había nacido y tenía algo de conciencia, y por esto en muchas ocasiones fui a clases con ella y estuve presente en sus estudios. Muchos de sus compañeros de universidad, que hoy en día son abogados reconocidos, al enterarse de que yo terminé siendo abogada dicen que lo mío fue por ósmosis y que estudié la carrera dos veces, porque ya siendo una niña la había cursado con ellos. Tuve la dicha de que en mis inicios en la carrera fui alumna de Augusto Luis Sánchez Sanlley (los que conocen la historia y han estudiado la Revolución de Abril y el 1J4 saben muy bien de quién estoy hablando), quien inculcó sin quererlo en mí el amor al Constitucionalismo. He tenido la dicha de conocer a varios de los héroes de la Revolución de Abril. Llevo en mi cuerpo sangre revolucionaria. Soy una de ustedes.
Amo mi país hasta la muerte. Literalmente. No acepto intervenciones ni inherencias de potencias extranjeras. Defiendo los ideales de Duarte. Lo mío no para en colgar banderitas en fechas patrias; por algo estudié Derecho. Si un día la soberanía del país que me vió nacer se encuentra en peligro, sin pensarlo dos veces daría mi vida cien veces más en su defensa. Vengo de una larga lista de patriotas, de hombres que no lo pensaron dos veces para exponer sus vidas en defensa de su Patria. Yo no lo hice porque no estaba viva, pero si me hubiese tocado vivir el momento histórico estoy mucho más que segura de que me hubiesen acribillado en el Altar de la Patria en defensa de la Soberanía Nacional y el Estado de Derecho.
Parece que en su ofuscamiento (y no pretendo en ningún momento ofenderles ni mucho menos), no han podido entender lo que he querido decirles.
Estoy 100% de acuerdo con el OBJETIVO INICIAL de La Feria. Creo que todos tenemos derecho a expresar nuestro descontento con lo que está ocurriendo en nuestro país. Esto es uno de los principios fundamentales de la Democracia. No estoy de acuerdo con la forma en que nuestro gobierno está haciendo las cosas. Sobre todo no estoy de acuerdo con que se utilicen mis impuestos para exaltar la figura del Jefe de Gobierno, disfrazando la realidad. El gobierno ha hecho muchas cosas buenas, pero también muchas malas. Los votos de todos nosotros fueron los que los pusieron a ellos al mando del país y por lo tanto tenemos derecho y estamos ejerciendo nuestro deber de reclamarles cuando no están haciendo las cosas de la manera más correcta.
Con lo que no estoy de acuerdo es que se desvirtúen las cosas y se violenten las leyes, y ese es mi punto principal. En este tipo de cosas, aunque sea penoso admitirlo, importa mucho la percepción de la ciudadanía. Si se convoca a una actividad social, la misma no debe tener matices diferentes ni degenerar en actitudes ilegales. Podrán decir que es injusto, pero es la realidad.
Me invitaron a una fiesta electrónica y lo que pusieron fue reggaetón.
Al igual que ustedes, estoy muy indignada con la actitud de las autoridades de no permitirnos (y me incluyo en el grupo) que nos expresáramos libremente. Violaron nuestros derechos, eso está más claro que el agua. Pisotearon la Democracia; esta todavía esta sangrando a los pies de la estatua del Patricio en el Parque Duarte. PERO ESO NO ES MOTIVO PARA LLAMAR A LA DESOBEDIENCIA CIVIL NI AL IRRESPETO A LA AUTORIDAD.
Galván, entiendo cómo te sientes. Entiendo lo que quieres hacer. Entiendo todo lo que pasó, pero la forma en la que te manejaste no fue la más correcta. Como intentamos explicarle a Milicen, pudiste haberte convertido en el mártir de la causa y utilizar lo que te sucedió como un punto a tu favor. Sin embargo, dejaste que tu pasión te cegara e hiciste todo lo contrario.
De la Ley seca conozco un poco. Por lo que me dijiste veo que nunca habías entrado a mi blog. Hice par de posts explicando lo que tú dijiste en tu comentario y cada vez que tengo la oportunidad de hacerlo trato de explicarlo a los demás. Además, si no me equivoco, en la prensa leí que eres Economista. Yo soy abogada y me parece que sólo por mi profesión debo conocer un poco más de leyes que tú.
Llamaste a la desobediencia civil. Dijiste muy claro “esta noche aquí no va a haber ley seca. Se acabó la Ley Seca.” Con esto contribuiste a que los que están de acuerdo con ella confirmen lo que han estado pregonando desde un principio, que los que estamos en su contra no somos más que un grupo de carajitos alcohólicos que nos estamos quejando porque no nos están dejando beber y bonchar.
Por otro lado…
Vuelvo y digo, yo no soy mercadóloga ni publicista. Nunca he tenido nada que ver con relaciones públicas. Ana sí sabe de esto; en eso trabajó muchos años y por eso fue que intentó ayudarlos cuando vió el camino que las cosas estaban tomando (pena que sus consejos fueron mal interpretados o ignorados). Sin embargo tengo mi opinión de lo que pasó. Tal y como he explicado varias veces, entiendo que no se supieron manejar. Si, es cierto, si era una actividad libre no se podía prohibir a nadie que estuviese repartiendo camisetas o dando declaraciones a la prensa (que por cierto nos encerraron a todos dentro de un grupo al cual realmente no todos pertenecemos) diciendo que somos parte de una fuerza que "está gestando para dar al traste con los partidos tradicionales". Yo no estoy gestando nada. Sin embargo, tampoco podían permitir que se tergiversara el fin de la misma. Lo que finalmente se hizo fue desvirtuar el objetivo de la Feria. Por respeto a ese objetivo yo no hice mi exposición fotográfica.
Desgraciadamente vives en un país con muchos tabúes y por más que luches y patalees no vas a lograr cambiar esto de la noche a la mañana. Ni siquiera a la fuerza. Mucho menos con actitudes ilegales. Tienes que adecuarte a la sociedad en que vives y manejar las cosas de una forma tal que al final consigas tus objetivos con el apoyo de todos. Toma como ejemplo mismo a don Narciso, que tiene tantos años en su lucha y es poco lo que ha logrado. Más aún, de manera violenta e irrespetuosa no vas a conseguir el apoyo y el RESPETO completo de la ciudadanía.
Hay que tener cuidado al hablar de Democracia. Te recuerdo que, malo o bueno, este gobierno fue democráticamente elegido. Te recuerdo además que la democracia pregona el respeto a las leyes y a la autoridad.
Es cierto que algunas leyes no son buenas. Es cierto que vivimos bajo una legislación con orígenes en el Código Napoleónico de 1804 (aunque ya estamos trabajando para por lo menos cambiar de Siglo). Es cierto que hay cosas que no son justas. Pero, y tus amigos que estudian derecho o que son abogados te pueden confirmar esto, hay una máxima jurídica que dice Dura Lex Sed Lex. La ley es dura pero es la ley. ¿No te gusta la ley? Eso no te da derecho a violentarla. Gracias a la Democracia tienes mecanismos a tu disposición para tomar acciones tendentes a modificarlas. ¿Estos mecanismos no funcionan? Trabaja para que sí lo hagan. ¿Qué el gobierno es el primero en violar las leyes? Esto no te da el derecho a violarlas tú también. ¿O es que cuando ves a alguien tirándose del puente le caes atrás y te tiras tú también porque él lo hizo? Pregúntale a tus amigos abogados para que te digan que la Ley de Talión fue abolida hace cientos de años.
Aunque no te parezca así, vivimos en un estado de Derecho Democrático. Ese Estado de Derecho Democrático es el que te permite a tí ser dirigente de izquierda. El que te permite a ti creer en el Socialismo y a mí creer en la Democracia Cristiana. El que te permite haber estudiado una carrera y ejercerla. El que te permite decir libremente (aunque sea a medias) que no estás de acuerdo con las cosas que están sucediendo. El que te permite que tengas libremente una ideología. El que te permite conectarte al Internet, tener un blog y expresar tu parecer en el blog de otras personas. El que te permite irte del país a lugares donde entiendes que las cosas funcionan de mejor manera.
Tengo muy en alto la figura de las Hermanas Mirabal. Si no hubiese sido por ella quizás hoy yo no estuviese viva o viviera en otras condiciones. De Duarte ni hablar. Al Prof. Bosch y a Amín Abel los respeto. No comparto sus ideales ni sus formas, pero los respeto.
Así como dicen que el Padre Rogelio tenía el derecho de repartir sus t-shirts, de Narciso dar declaraciones a la prensa diciendo en nombre de todos algo que no es del todo cierto, de que tú llamaras al irrespeto a las leyes, yo también tengo el derecho de exponer mis opiniones libremente en mi página.
Los respeto a ustedes y espero que me respeten a mí. No me gustó la forma en que hicieron las cosas, a ustedes no les gustó que yo me formara una opinión de las mismas y las expresara libremente. Pero todo esto es parte de la Democracia.
Sigan con su lucha y ojalá no se topen con más personas que piensan como yo.
Para cualquier cosa, saben que siempre pueden contar conmigo, siempre y cuando se respeten las leyes y la autoridad. Y si te vuelven a meter preso ILEGALMENTE júralo que la primera persona que lo va a denunciar soy yo.
Creo en las leyes porque ellas son las que nos permiten vivir en una sociedad organizada.
Las autoridades son como los padres. Podemos no estar de acuerdo con ellas, pero siempre debemos respetarlas.
Los consejos son como las lentejas, si quieres los tomas, si no, los dejas.
Recuerda que tu y yo tenemos un fin común: la protección de nuestros derechos y el amor a nuestra Patria.
Y creo que estamos de acuerdo con que no estamos de acuerdo.

¡Dios, Patria y Libertad!
¡Arriba la República Dominicana!